Meyer apela a la memoria de los socios.

Mientras tanto, Alberto Meyer prefiere armar su equipo y esperar la fecha de los comicios. Ya en campaña ha dejado algunas cosas en claro.
Lo primero es que no quiere tener ningún tipo de relación con la actual C.D. Asimismo se lo vio muy enojado por los cambios que ha habido con respecto al tema del traslado, cosas que vienen de la gestión de Jorge Ruiz.
También habló de impulsar penalmente una causa contra aquellos que faltaron al compromiso con el Club ya que todavía nadie sabe cuál fue el arreglo final y qué le quedará a Deportivo Morón del predio de Brown y La Roche.
Recordó el dudoso dinero que se le entregó al estudio jurídico del Dr. Schumacher que casi fue el mismo que el Club obtuvo por Perotti y todo a cambio de nada.
Habló de un Club ordenado y austero. Recordó que llegó en medio de una asamblea y que a lo largo de sus cuatro períodos (es el Presidente que más tiempo estuvo al frente del Club en forma contínua) logró salir del concurso, saneó las deudas, blanqueó a los empleados, estuvo a minutos del ascenso y se compró el predio de Pontevedra entre otros logros.
Meyer dijo que solo él va a elegir a su gente y que no va a cometer errores anteriores de forzar unidades que duran poco y no sirven.
Finalmente apeló a la memoria de los socios y recordó que cuando él asumió, nadie quería hacerse cargo; pero que a la finalización de su mandato hubo dos listas más que querían conducir un Club que estaba ordenado y al día. Dijo que todavía al día de hoy algunos ex jugadores y empleados le piden que vuelva recordando que en su gestión tenían en claro cuándo y cuánto iban a cobrar por sus servicios.