Cambiar a tiempo

Por Ezequiel Echeverría

Foto: Osvaldo Abades (h)

Luego de un comienzo malo, con errores incluídos, Deportivo Morón cerró con todas las luces un triunfo frente a Riestra que hasta ese momento venía invicto y con pretensiones de puntero.

Demasiado temprano, la primera rareza de la tarde estuvo en el arco del Gallo. Tiro libre para la visita desde el círculo central, Peratta que cree vaya a saber uno qué, y la pelota que termina metiéndose a sus espaldas.

Luego del desafortunado error del uno, el equipo de Giunta llega al empate con un remate a la salida de un córner de Federico Domínguez. Pero unos minutos más tarde, nuevamente una pelota en el área chica del Gallo es cabeceada por Gonzalo Peralta ante la inactividad de Otermín y nuevamente de Sebastián Peratta.

Allí los peores minutos de Morón. Riestra estaba dos a uno sin concretar una jugada sobre el arco rival. Uno esperaba cambios de movida para la segunda mitad. Pero Giunta decidió probar nuevamente con el adelantamiento de Lemos. No dio demasiado resultado y es por ello que a los diez minutos mete el cambio clave: Javier Pérez por Adrián Peralta (de flojísima actuación).

De esta manera el equipo quedó con cuatro en el fondo, tres en el medio (Domínguez se volcó por la izquierda), un media punta y dos bien arriba. El atrevimiento del recién ingresado le dieron a Morón un penal (que Gerardo transformó en gol), una expulsión rival y una locura colectiva al fondo de Riestra que cambió literalmente todo el encuentro.

Así el equipo de Giunta fue tanto que concretó el tercero en los pies de Yassogna (previo error de Rhul, arquero visitante) y el cuarto de Altobelli cuando la visita ya estaba jugada al empate y con uno menos.

Luego de esta fórmula final ( 4-3-1-2) la pregunta es si el técnico repetirá este esquema desde el inicio frente a Acassuso o seguirá intentando con un tibio 4-4-1-1.

Así como el Gallo se desdibujó sobre el final frente a Almirante, en esta ocasión, la fórmula apareció en los últimos 35 minutos.

Muy buenos trabajos de Altobelli, Fede Domínguez, Gerardo, Yassogna y sin dudas la figura de la tarde: Javier Pérez.

Lo más flojo,  el flaco en el arco. Trascendió una discusión muy fuerte entre él y algunos de sus compañeros luego del partido frente a Estudiantes. Peratta se retiró del entrenamiento el domingo y se ausentó el lunes. Diego Spina intercedió para que volviera el martes y entrenara para concentrar. 

Esto, indudablemente, influyó mucho en el "uno" porque de lo contrario no se explican los dos errores infantiles en los dos goles de la visita. Pero ahora, sus compañeros lo dieron vuelta y seguramente la calma volverá a los vestuarios.